I love the Lord, because He has heard
my voice and my pleas for mercy.
2 Because He inclined His ear to me,
therefore I will call on Him as long as I live.
Psalm 116:1-2 (ESV)
Note from a Parent:
How wonderful it is to know that our good God always listens to us, in the midst of our hustle and bustle, in a world that absorbs us more and more. We can set aside time, that resource that not only seems, but truly is, as valuable as gold, and that becomes more valuable when we deposit it in Him who brings order to our day. As He does it, he fills us with strength and help from on high, in those instants filling our space, our own lives and those of others, thus allowing us to begin our tasks with the assurance that can only come from our Heavenly Father.
All through my life I have understood the power there is in prayer, both in private and as a body, and how this enriches those of us who are touched by the prayers of others who, unbeknownst to them, help us to speak to our Father, allowing us in turn to be support, arms, and eyes, for others in the spiritual realm. The resulting powerful impact in our lives is stronger and bigger than we can begin to imagine.
At times we don’t know how to pray, nor what to ask. But I’ve understood that each prayer time is just our Lord’s excuse to unite us in one body and, as His word says, send blessing and eternal life as we join together in community. The gift of this time is a blessing the Lord has chosen to give us to remind us of the importance of coming together to lift our voices for one another and thus strengthen the work that began in God’s heart and that He upholds every day.
This is why, as a mom in the ECA family, I encourage you to join a prayer group and set aside time to support us, laying bricks that will be strong as rocks and thus protect the school with the power that can only come from one of the strongest and most beautiful keys our good God has given us: prayer.
We will be holding parent prayer meetings each Tuesday, Wednesday, and Thursday from 7:15 to 7:45 am. We will experience unity and love as brothers, persevering, as His word says, in being of one mind.
Amo al Señor porque escucha mi voz
y mi oración que pide misericordia.
Debido a que él se inclina para escuchar,
¡oraré mientras tenga aliento!
Salmo 116:1-2
Una nota de una madre de ECA:
Que hermoso es saber que nuestro buen Dios siempre nos escucha, en medio de tanto afán en el que andamos, en un mundo que cada vez nos absorbe más. Apartando un tiempo que parece oro y es que así es, pero que se vuelve más valioso cuando lo dejamos en aquel que pone orden a nuestro día. Mientras lo hace va llenándonos de sustento y amparo de lo alto, llenando por unos instantes nuestro espacio, nuestras vidas y las de otros, y así comenzar nuestras labores con la seguridad que solo nos da nuestro Padre Celestial.
A lo largo de mi vida he comprendido el poder que tiene la oración íntima y en comunidad, y como esta enriquece a los que somos contagiados por las oraciones de otros, que sin saber nos ayudan a hablar con nuestro Padre permitiéndonos ser apoyo, brazos y ojos para otros en el reino espiritual; haciendo un efecto poderoso en nuestras vidas sin ni siquiera alcanzarnos a imaginar lo enorme y poderoso que este es.
A veces no sabemos cómo orar, ni qué pedir, pero he entendido que cada espacio es solo una excusa de nuestro señor para unirnos en un solo cuerpo y como dice su palabra allí enviar bendición y vida eterna, y esto lo hace cuando estamos unidos en comunidad. Es una bendición como el SEÑOR ha querido regalarnos este tiempo para recordarnos la importancia que tiene unirnos y levantar nuestra voz los unos por los otros, y así fortalecer una obra que empezó en el corazón de Dios y que Él la sustenta cada día.
Es por eso que los animo como mamá de la Familia ECA a unirse a los grupos de oración y apartar un tiempo para apoyarnos poniendo ladrillos que sean fuertes como rocas y así blindar el colegio con el poder que solo nos da una de las llaves más hermosas y poderosas que nos ha regalado nuestro buen Dios, la oración.
Tendremos reunión de oración de padres de familia los días martes, miércoles y jueves de 7:17 a 7:45 am. Experimentaremos la unidad y amor como hermanos, perseverando como dice su palabra en un solo sentir.
